Prana es lo que se llama el Soplo de Dios

Prana tatwasEnergía cósmica el Prana, los Tatwas y el Pranayama. Son siete los centros energéticos de la transformación de la energía vital llamada Prana. Los chakras son a modo de vórtices, los centros por donde entra el Prana al organismo. 

Prana es un término orientalista que designa la sexta fuerza fundamental de la creación, partiendo de la base que afirma, que Dios es el séptimo poder del universo. Entonces, el Prana es lo que se llama el Soplo de Dios y que provoca en los organismos, las manifestaciones vitales...

Prana es la energía cósmica. Prana es vibración, movimiento eléctrico, luz y calor, magnetismo universal, vida. Prana es la vida que palpita en cada átomo y en cada Sol. El Prana está relacionado con la mente; mediante ella se vincula a la voluntad, al alma individual, y mediante ésta se vincula al Supremo Ser.

Prana es la suma total de las fuerzas latentes ocultas en el hombre y en la mujer, que se hallan en todas partes. El sitio del Prana es el corazón. Existe, específicamente, un solo Prana, pero éste realiza múltiples funciones

El escritor Waldemar dice textualmente en una de sus obras: "Prana, la sexta fuerza fundamental, no sólo surte efecto en los hombres, sino que es el principio vital de todo ser existente en el universo". El Cristo Cósmico, es el Logos solar. La energía solar viene del Cristo Cósmico. El Prana Crístico hace crecer la espiga del trigo, y, en el grano, queda encerrada esa substancia Crística.

Prana es la Energía Cósmica. Prana es vibración, movimiento eléctrico, luz y calor, magnetismo universal, vida. Prana es la vida que palpita en cada átomo y en cada sol. Prana es la vida del Éter. La Gran Vida, es decir Prana, se transforma en una sustancia, es Akash. El Akash es una sustancia maravillosa que llena todo el espacio infinito, y que cuando se modifica se convierte en Éter. Resulta interesante saber que el Éter, modificándose, se convierte a su vez en eso que llamamos Tatwas.

Es necesario que usted conozca la Ley de la Vibración Universal. El estudio de los Tatwas es importantísimo. Tatwa (este término es indostánico) es vibración del Éter. Ahora los científicos dicen que no existe el Éter y que lo único real es el campo magnético. También podríamos decir que no existe la materia y que lo único real es la energía. Estas son palabras, cuestión de términos.

El campo magnético es el Éter. “Todo viene del Éter: todo vuelve al Éter”. Sir Oliver Lodge, el gran científico británico, dice: “Es el Eter el que da lugar, por las diversas modificaciones de su equilibrio, a todos los fenómenos del Universo, desde la impalpable luz hasta las masas formidables de los mundos.”  Recuerde: Tatwa es vibración del Éter. En esta época de la radio, la televisión y los cohetes teledirigidos, resultaría absurdo negar la vibración del Éter. Un gran sabio dijo: “La vida ha nacido de la radiación, subsiste por la radiación y se suprime por cualquier desequilibrio oscilatorio”.

Los científicos que ponen en duda la existencia del Éter, no tienen bases científicas para sus teorías. Realmente ellos están jugando con palabras, con términos. Decir que el Éter es radioactividad, o campo magnético, etc., ni quita ni pone a la realidad del Éter. En todo caso sus dudas, análisis y cambio de términos sólo servirán para estudiar eso que se llama Éter. Las más de las veces, los hombres peleamos únicamente por cuestión de términos de palabras, etc., etc., pero en el fondo los hechos son hechos.

Los sabios rusos han descubierto con sus poderosos telescopios, mundos en estado protoplasmático. Esos mundos protoplasmáticos han salido del Éter. Podemos aceptar por simple inducción lógica Mundos Etéricos. Tal vez no les guste este término a algunos científicos. El término importa poco. Lo importante son las realidades. Todo mundo antes de ser protoplasmático existe en estado etéreo. El gran científico indostán Ramá Prasá, dice: “Todo sale del Éter, todo vuelve al Éter”. Si del Éter sale el protoplasma, tenemos que aceptar que el Éter está en el fondo vital de todo lo que existe.

Los místicos orientales consideran que el Cuerpo Etérico del hombre tiene cuatro clases de éteres. Esto no le gusta a los científicos del occidente. Empero cuando los científicos occidentales estudien el Éter (no importa el nombre que le den), entonces tendrán que aceptar por simple análisis y experiencia propia los cuatro éteres orientales. Así pues el Cuerpo Etérico del hombre tiene cuatro éteres: Éter Químico, Éter de Vida, Éter Luminoso, Éter Reflector. Cada uno de estos cuatro éteres, tiene sus funciones en relación íntima con toda la economía orgánica. El Éter Químico está relacionado con todos los procesos de asimilación y eliminación orgánica.

El Éter de Vida se halla relacionado con los procesos de la reproducción de la raza. El Éter Luminoso se relaciona con  todos los procesos de percepción sensorial. El Éter Reflector está íntimamente relacionado con las facultades de la memoria, imaginación, voluntad, etc., etc. El Cuerpo Vital controla todo el sistema nervioso vaso motor, es el asiento de la vida. Cada átomo etérico penetra dentro de cada átomo físico y lo hace vibrar. Si le extraemos definitivamente el Cuerpo Vital a una persona, esa persona muere inevitablemente.

Es el colmo del absurdo suponer siquiera por un momento, que un organismo químicofísico, pueda vivir sin el Cuerpo Vital. Los mismos ateos materialistas rusos, después de haber estudiado profundamente la materia, comienzan a volverse muy prudentes en esto de dar conceptos sobre el fondo vital de la materia viva. El hombre de ciencia explorando el organismo humano se está acercando al Cuerpo Etérico. Allá llegará inevitablemente, y pronto podrá condensarlo con algún ectoplasma para estudiarlo en el laboratorio.

Todas las funciones de nuestro organismo, todas las actividades de las calorías, de la reproducción, de la combustión, del metabolismo, etc., etc., tienen sus base en el fondo vital. Cuando el Cuerpo Vital se debilita, viene la enfermedad del Cuerpo Físico. Existe el Éter en estado ígneo, (Tejas). Existe el Éter en estado gaseoso o fluídico, como principio del aire, (Vayú). Existe el Éter en estado acuoso como principio del agua, (Apas). Existe el Éter en estado pétreo como principio mineral, (Prithvi).

Estos son los Tatwas de los indostanes. Cuando estos Tatwas cristalizan, o se condensan, tenemos entonces los elementos físicos, fuego, aire, agua y tierra. Nuestro cuerpo etéreo está formado de Tatwas. Los Tatwas y los chacras están íntimamente relacionados. Los Tatwas entran a los chacras y luego pasan al interior de las glándulas de secreción interna. Dentro de las glándulas, los Tatwas intensifican el trabajo de esos minúsculos laboratorios endócrinos transformándose en hormonas.

Los Tatwas entran al organismo, pero no vuelven a salir de él. Los Tattwas se transforman también en genes y cromosomas que más tarde vienen a transformarse en espermatozoos. Todo sale del Éter, todo vuelve al Éter. El Éter es la condensación de una sustancia llamada Akasa. Esta substancia es la primera radiación de la raíz Mulaprakriti, o materia primordial insípida e indiferenciada entre los alquimistas como el Ens Seminis.

Akash es la radiación ígnea de la materia primordial. Akash está contenido en el semen. Los alquimistas dicen que el agua es el habitáculo del fuego. Akash es el Kundalini de los indostanes. La materia primordial está representada por las aguas de todos los génesis religiosos. El protoplasma de toda nebulosa ha sido primero etéreo. Si vamos más lejos tenemos que aceptar que detrás de todo efecto existe una causa. El Éter mismo tiene que tener una causa. Nosotros hemos aprehendido de los yoguis del Indostán, que detrás del Éter está el Akasa. 

Dicen los sabios orientales que el Akasa es un mar de fuego. Dicho fuego Súper Astral está contenido en el Ens Seminis (El Mulaprakriti de los sabios de la India). El Ens Seminis son los átomos simientes de toda materia conocida. Akash es sonido primordial. Akash es fuego Súper-Astral. El sonido condensa por mediación de Akash. La Serpiente del Kundalini es fuego y es sonido. Nadie podría encarnar el Verbo, sin levantar la Serpiente Sagrada. Sin Akash es imposible concretar y cristalizar el sonido.

Los Vayus Pranas son ondas sonoras del Akash. Esas ondas sonoras se condensan en los Tatwas del Eter. Los Tatwas se cristalizan en los cuatro elementos de la naturaleza: fuego, aire, agua y tierra. En conclusión el mundo físicoquímico, resulta una materialización del sonido. El mundo físicoquímico es sonido condensado. No aceptamos un Dios antropomórfico y dogmático, pero científicamente aceptamos al sonido como causa causorum del Universo.

Tiene que existir también una causa para los sonidos pre cósmico. Los grandes sabios orientales nos hablan del Logos Solar. El doctor Krumm Heller decía que el Logos suena. Ciertamente el Logos es Unidad Múltiple Perfecta. El Logos es el Ejército de la Palabra. El Logos es el Verbo. “En el principio era el Verbo, y el Verbo era con Dios, y el Verbo era Dios. Este era en el principio con Dios. Todas las cosas por El fueron hechas; y sin El nada de lo que es hecho, fue hecho. En El estaba la vida, y la vida era la luz de los hombres. Y la luz en las tinieblas resplandece; más las tinieblas no la conocieron”.

El Logos no es un individuo. El Logos es un ejército de seres inefables. Akash es el principio del Eter. Vayú es el principio etérico del aire. Tejas es el principio etérico del fuego. Prithvi es el principio etérico del elemento tierra. Apas es el principio del agua. Existen dos Tatwas secretos llamados Adi y Samadhi que vibran durante la Aurora y que son excelentes para la meditación interna. Sobre estos Tatwas no nos extenderemos ahora porque son de utilidad solamente para los estudiantes adelantados.

HORARIO TATTWICO La vibración de los Tatwas comienza con la salida del Sol. Cada Tatwa vibra durante 24 minutos en un período de dos horas. El primer Tatwa que vibra es Akash, después le siguen en orden sucesivo; Vayú, Tejas, Prithvi, Apas. A las dos horas vuelve a vibrar Akash y se repite la sucesión de los Tatwas en el mismo orden. Los Tatwas vibran de día y de noche. Es necesario saber la hora de salida del Sol.

El anuario astrológico de Bucheli es uno de los calendarios que marca la hora de salida del Sol para cada lugar de la América Latina. Algunos diarios (especialmente en los Estados Unidos) y revistas, indican la hora de salida del Sol. Es también útil para este propósito el Calendario de Galván. Los que quieran el Anuario Americano de Bucheli pueden pedirlo a la siguiente dirección: Sra. Elly de Bucheli, Casilla 1880, Santiago de Chile, S.A.

Pueden acceder al Pranaya Egipcio haciendo CLICK aquí

Samael Aun Weor

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