El demonio Cherenzi

Cherenzi demonio anagarikaTreinta años de edad tenía (Samael Aun Weor) cuando fui sometido a terribles y espantosas pruebas; lo que entonces vi, lo que me sucedió, bien vale la pena relatarlo. Fue en la noche de misterio cuando sentí cerca de mí el aullido del huracán, entonces comprendí. ¡Cuán sólo me encontraba aquella noche! y sin embargo, doquiera me situase, aquí, allá, o acullá, bien pronto me veía rodeado por las multitudes, no sé como venían las gentes hasta y luego.

Muchas veces hube de enfrentarme valerosamente a las Potestades Negras que dijera el apóstol Pablo de Tarso en el Capítulo II de la Epístola a los de Efeso. 

Incuestionablemente, el adversario más peligroso de aquella noche tenía el título fatal de Anagarika. Quiero referirme en forma enfática al demonio Cherenzi. Aquella repugnante criatura tenebrosa había enseñado en el mundo Tantrismo Negro. El resultado aparecía a simple vista: cola diabólica desarrollada y horripilantes cuernos.

Aquel tántrico de la mano izquierda llegóse ante mi presencia acompañado por otros dos demonios. A quemarropa, como dicen por ahí, le espete la siguiente pregunta ¿Tú me conoces? Respuesta ¡Si! te vi una noche en la ciudad de Bacatá, cuando yo dictaba una conferencia.

Lo que luego sucedió no fue ciertamente muy agradable. Aquel Anagarika me había reconocido y enfurecido arrojaba fuego por los ojos y la cola. En forma violenta quiso herirme, yo me defendí con las mejores conjuraciones de alta magia y al fin huyó con sus acompañantes. Solitario continué por mi camino en la noche de misterio, aullaba el huracán.

Doctrina Gnóstica develada por Samael Aun Weor

Vamos ahora a relatar una iniciación negra tal como fue investigada por nosotros:

Fue el aspirante sacado del cuerpo físico en momentos en que éste se hallaba durmiendo. La fiesta de los demonios se celebró en una calle. Todos los asistentes estaban en Cuerpo Astral. El neófito practicaba Magia Sexual negativa con derrame del semen. Así estaba progresando en la ciencia de los demonios. Estos se presentaron a la fiesta vestidos con túnicas negras. La fiesta fue un verdadero aquelarre. Terminada la orgía, los Adeptos de la mano izquierda condujeron a su discípulo muy amado hacia un templo de color amarillo. Ese era un antro de Magia Negra. Aparentemente el templo visto desde fuera parecía una humilde capilla religiosa. Dentro era un magnífico palacio.

Dentro del templo existían dos pisos o plantas y magníficos corredores por donde transitaban los tenebrosos. Los Adeptos de la sombra felicitaron al candidato por sus tenebrosos triunfos. Era horrible ver a los Adeptos de Santa María. El candidato se sentía en su ambiente. El rabo de los diablos aparecía en aquellos fantasmas astrales. La fiesta de las tinieblas fue magnífica. Un sacerdote del abismo subió sobre una piedra para pronunciar un sermón. Este fantasma era un equivocado sincero. Un hombre de buenas intenciones pero perdido fatalmente. Este Adepto de las sombras dijo solemnemente: “yo seré fiel a mi religión, nada me hará dar un paso atrás. Esto es sagrado”.

Después continuó el tenebroso con un largo discurso que todos aplaudieron.

Al agasajado que había tenido la desgracia de despertar el Kundalini en forma negativa fue marcado con un sello fatal. Esa marca era triangular y tenía líneas negras y grises. El sello fue primero puesto al fuego antes de usarlo. La marca del sello quedó debajo del pulmón izquierdo. Los tenebrosos pusieron un nombre fatal al discípulo, y éste fue grabado con letras negras en el antebrazo izquierdo.

Este nuevo iniciado negro fue conducido después ante una estatua de bellezas terriblemente maligna que simbolizaba a la diosa negra, el reino de Santamaría. El discípulo sentado ante esa estatua cruzó las piernas al estilo Anagarika. La izquierda sobre la derecha. Puso luego sus manos sobre la cintura y se concentró en la diosa fatal. Después de todo, el tenebroso regresó a su cuerpo físico feliz de triunfo.

Hasta aquí la investigación hecha por nosotros, en relación con las iniciaciones del abismo.

Samael Aun Weor extracto del libro "El Matrimonio Perfecto" Capitulo 13º Las Dos Marías

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