El oro espiritual

Aquí estamos, esta noche, para platicar con ustedes ampliamente. Ustedes han venido aquí para escucharme y yo, francamente, estoy aquí para hablarles…

Ante todo, lo que necesitamos es un cambio total en nuestra manera de vivir, en nuestra manera de pensar y de sentir. Necesitamos, pues, cambiar totalmente nuestra vida, porque todos, en realidad de verdad, sufrimos, estamos llenos de indecibles amarguras, tenemos múltiples anhelos, aspiraciones, etc.

Cuando uno ha leído algo en la vida, incuestionablemente reflexiona. Muchos hemos leído sobre la vida en el Tíbet, y hemos estudiado, por ejemplo, autores como Martes Lobsang Rampa, Krumm Heller, Mario Roso de Luna, etc.; se nos habla de palacios maravillosos, de ciudades encantadas y muchas otras cosas. Obviamente, quisiéramos todos ver algo distinto, oír algo diferente, llegar a un lugar donde no existiera esta vida dolorosa e insoportable en la que nos encontramos: El ruido de las ciudades, los automóviles, la gasolina, el humo, las amarguras de cada instante, las penas, los sufrimientos incesantes…

Desafortunadamente, las gentes no saben cómo cambiar su vida, y eso es, precisamente, lo que esta noche vamos a estudiar…

Ante todo, es bueno entender que nos encontramos en instantes de crisis mundial y de bancarrota de todos los principios. Estamos ante el dilema del SER y del NO SER de la Filosofía. Son estos momentos de angustia indecible. Se hace urgente, pues, comprender cuál ha de ser el camino que nos ha de llevar a la verdadera Felicidad…

Amigos, es necesario que nos conozcamos a sí mismos profundamente y en todos los Niveles de la Mente. En el mundo hay, esencialmente, DOS ESCUELAS que se combaten mutuamente. De un lado tenemos a los MATERIALISTAS-ATEOS, enemigos de lo Eterno, del Ser; y en el otro, tenemos nosotros a la gente de tipo ESPIRITUAL, a las GENTES RELIGIOSAS.

Son dos Escuelas que luchan a muerte por la supremacía, y ¿cuál tendrá la razón? Eso es lo que esta noche vamos a investigar profundamente…

Bien sabemos nosotros que la Dialéctica Materialista de Carlos Marx invadió las mentes de millones de personas. Nadie desconoce, por ejemplo, que en la Rusia Soviética existen millones de personas entregadas, pues, al estudio del Materialismo Dialéctico. Por otra parte, las Religiones luchan terriblemente por la supremacía. Las Religiones tienen sus dogmas, sus creencias, quieren imponer sus ideas en todas partes y en todos los países de la Tierra. Estamos viviendo esa lucha cruenta que existe entre la Religión y el Materialismo.

Es necesario que nosotros nos hagamos conscientes de esta cuestión. ¿Quién tendrá la razón, los Materialistas o los Religiosos? Obviamente, se requieren estudios para comprender… Ante todo, ¿qué cosa es la “MATERIA”? Realmente eso es algo que el Materialismo no entiende. Porque si decimos que “Materia es un pedazo de hierro”, ¿entonces qué cosa es el algodón, o qué cosa es un pedazo de vidrio, o un pedazo de cobre? Afirmar en forma global que “todo eso es Materia”, pues, en verdad, resulta demasiado empírico. Nadie, en Química, se atrevería por ejemplo, a darle el nombre de “Fósforo” a cuanta substancia encuentre en el laboratorio.

En Física, sí se comete ese error: Llamar “Materia” al hierro, o al algodón, o al cobre, o al sulfato de sodio; ¡absurdo! En realidad de verdad, los “Pontífices” del Materialismo no conocen la Materia. Pero ahondemos un poco más en esta cuestión: Entonces, ¿qué cosa es la “Materia”? Debemos entender esto para que podamos orientarnos en la vida, y quiero que ustedes pongan mucha atención…

Esto es algo que no se conoce; la Materia es terram incógnita para la ciencia; nadie sabe qué cosa es “Materia”. Es un concepto de la Mente, pero un concepto que puede estar, o no, equivocado. Normalmente está equivocado, porque llamar “Materia” a cuanta substancia existe en el mundo, es falso. “Un modo del Movimiento (dicen algunos hombres de ciencia), eso es Materia”. Pero esa frase resulta muy socorrida entre gentes de pensamiento científico. Entonces, ¿qué es? Nadie lo sabe. Pero los gnósticos sí sabemos qué cosa es la “Materia”. Realmente, eso que vemos nosotros como Materia, no es más que una cristalización de la SUBSTANCIA HOMOGÉNEA ORIGINAL, Primitiva, Divinal. Obviamente, tal Materia o tal Substancia debe tener dos Polos: El Positivo y el Negativo. Originalmente, la Substancia esa que llaman “Materia”, estuvo en el Caos antes de que amaneciera la vida.

La TIERRA como Substancia, estuvo depositada entre el CAOS PROFUNDO hace millones de años; era una Substancia informe, una especie de “Semilla”, un GERMEN CÓSMICO dentro del cual estaba contenido todo lo que actualmente ustedes ven a su alrededor. Esa Substancia era purísima, inefable, homogénea…

Así como el germen de un árbol contiene en sí a todo el árbol (en estado latente), así también ese MUNDO ANÍMICO, esa Substancia, ese… …de los gnósticos, ese ILIASTER, era una semilla que contenía, en sí, todo lo que actualmente existe en el mundo, un Germen Cósmico y eso era todo. Pero ese Germen, esa Substancia, ese ESPÍRITU, era una sola cosa, era homogéneo. Cuando amaneció la Vida Universal, ese Germen fue diferenciado por el IMPULSO ELÉCTRICO del LOGOS-CAUSAL. Entonces devino como un Caos, y tal Caos fue fecundado, a su vez, por el FUEGO. Y aquel Germen tuvo vida, y la tuvo en abundancia; empezó a cristalizar bajo el impulso de la PALABRA CREADORA del primer instante. Fue el FIAT LUMINOSO y ESPERMÁTICO de la Aurora del Maha-Manvantara, quien originó la cristalización de ese MUNDO-GERMEN.

En principio ese Mundo-Germen no fue más que un MUNDO DE LA MENTE, más tarde cristalizó en la forma ASTRAL, y mucho más tarde en la forma VITAL, y por último, en la forma FÍSICA que actualmente tiene. Por el Impulso Eléctrico primitivo, original, aquel Germen de Vida llamado “Tierra”, se diferenció en Polos Positivo y Negativo. Pero a través del tiempo y de las edades, los dos Polos de la Vida Universal llamados “ESPÍRITU” y “MATERIA”, se fueron diferenciando cada vez más y más, hasta llegar a ser lo que ahora son. Así que, en realidad de verdad, Espíritu y Materia no son sino dos formas de lo mismo; eso es todo. El Espíritu es Materia enrarecida; la Materia es Espíritu cristalizado.

Así que las dos Escuelas que se combaten mutuamente se fundamentan en la ignorancia, porque parcializarse únicamente por el aspecto negativo llamado “Materia”, es absurdo; o aferrarse a los dogmas intransigentes de muchas sectas religiosas, es también absurdo. La Verdad no está en la tesis ni en la antítesis, sino en la SÍNTESIS. La Verdad no se resuelve con la lucha de los contrarios; sólo mediante la síntesis podemos en verdad resolver el problema de los opuestos. Así que la Materia, en última síntesis, no es más que Substancia Homogénea desconocida para los físicos, totalmente desconocida…

Ha llegado la hora de entender que la lucha entre Espiritualistas y Materialistas se fundamenta en la ignorancia, porque el Espiritualismo es tan solo el Polo Positivo de dicha Substancia (llamada “Tierra”), y el Materialismo es el otro polo, el Polo Negativo. Pero la Verdad no está en el Polo Positivo ni en el Polo Negativo, sino en la Síntesis. Por eso nosotros, los gnósticos, abogamos por un MONISMO TRASCENDENTAL; llegamos a la conclusión de que lo que importa es la Substancia Universal, y que esa Substancia llamada “Tierra” o “Materia”, o como la queramos denominar, en última síntesis es algo homogéneo, puro, Espiritual y terriblemente Divinal.

Obviamente pues, si la Verdad no está en el Espiritualismo ni en el Materialismo, ¿dónde la debemos buscar? ¿En cualquiera de los dos Polos? ¡No!, debemos ir a la Síntesis, debemos buscar la Verdad dentro de nosotros mismos, aquí y ahora. Pero es necesario llegar a la EXPERIENCIA DE LA VERDAD; y nadie podría llegar a la experiencia directa de la Verdad si antes no desintegrase el Ego Es necesario que ustedes sepan que tienen un Yo. Cuando golpean en una puerta, por ejemplo, y les preguntan: ¿Quién eres? Responden: Yo… Ese “YO” es el que hay que AUTOEXPLORAR. ¿Qué tenemos dentro? ¿Qué somos? ¿Qué sabemos de la vida, qué sabemos de la muerte? Necesitamos Autoexplorarnos para Autoconocernos.

Ciertamente, el CUERPO FÍSICO no es todo. Un cuerpo está formado por órganos, los órganos por células, las células por moléculas, las moléculas por átomos; y si fraccionamos un átomo, liberamos Energía. En última síntesis, el cuerpo físico se resume en distintos tipos y subtipos de Energía. Necesitamos, en verdad, nosotros, Autoexplorarnos para Autoconocernos. Más allá del cuerpo físico tenemos un ASIENTO VITAL; éste ya ha sido descubierto, por los físicos Rusos; inventaron un lente con el cual ven el CUERPO VITAL; lo están estudiando, lo tienen fotografiado. Ese Cuerpo Vital es el fundamento de la vida orgánica, pero más allá del cuerpo físico con su Asiento Vital, está el Yo, el mí mismo, el sí mismo. Amigos: Es necesario que estudiemos a ese Yo, que lo comprendamos, porque ese Yo es un nudo en el libre fluir de la Energía Universal, es un nudo que hay que desatar…

El Yo, en sí mismo, es una multiplicidad de agregados psíquicos y cada uno de ellos, incuestionablemente, representa algún defecto de tipo psicológico. Nosotros necesitamos saber que la CONCIENCIA (que es lo más digno, que es lo más decente que tenemos en nuestro Ser) está enfrascada entre todos esos múltiples agregados que constituyen el Ego.

Es claro que necesitamos desintegrarlos para poder libertar la Conciencia. Sólo una Conciencia libre y soberana, dueña de sí misma, puede en verdad, mis queridos amigos, experimentar Eso que es LA VERDAD, Eso que está más allá del cuerpo, de los afectos y de la mente. Necesitamos conocer la Verdad. El Gran Kabir Jesús dijo: “Conoced la Verdad y ella os hará libres”… Cualquier idea que nosotros tengamos sobre la Verdad, no es la Verdad; cualquier concepto que nosotros nos forjemos sobre la Verdad, no es la Verdad; cualquier opinión que nosotros tengamos sobre la Verdad, no es la Verdad. Necesitamos experimentar la Verdad directamente, como cuando uno mete el dedo en la lumbre y se quema.

Sólo la experiencia de la Verdad nos dará las fuerzas suficientes como para seguir por el camino que ha de conducirnos a la Liberación Final. Necesitamos, sí, liberar la Esencia para que podamos experimentar directamente la Verdad. La Conciencia, en realidad de verdad, es el Don más precioso que tenemos. Desgraciadamente, la tenemos enfrascada entre el mí mismo, entre “nuestra persona”, entre nuestro Yo, en esto que cargamos dentro, entre nuestros defectos psicológicos. Necesitamos cambiar totalmente, desintegrar ese mí mismo, ese Yo, acabar con eso que tenemos de inhumanos y de perversos, para que la CONSCIENCIA LIBRE pueda experimentar la Verdad.

La Conciencia, en sí misma, es maravillosa. Un pescador, por ejemplo, acostumbrado a luchar contra los tiburones en el inmenso mar, no les temerá jamás ni podrá ser dañado. Similarmente, la CONCIENCIA DESPIERTA no puede ser dañada por las bestias más terribles del Universo. Un luchador, un hombre de guerra, con su lanza podrá defenderse de los peores enemigos, quebrantar las corazas y los aceros. Similarmente, aquél que tenga la Conciencia despierta podrá defenderse de las Fuerzas Tenebrosas y no recibir daño alguno. Un químico que haya inventado, por ejemplo, un antídoto contra el veneno de las serpientes, no sería víctima de ellas. Similarmente, aquél que tiene la Conciencia despierta no podrá ser víctima de todos esos elementos psíquicos inhumanos que existen en nuestro interior…

Se nos ha dicho (y eso es verdad), que la Conciencia despierta es como el “LEÓN DEL BUDDHA”: ¡Ruge! Y cuándo ruge, los perversos huyen despavoridos; pero los Bodhisattvas, los discípulos que están en el Real Camino, se acercan y escuchan… Ciertamente, la Conciencia despierta es grandiosa, sublime, inefable, y nos confiere múltiples Poderes… En nombre de la Verdad hemos de decir que la Conciencia no la hemos sabido usar hasta la fecha actual; la tenemos metida entre los diversos agregados psíquicos que constituyen el mí mismo, el sí mismo. No son las Escuelas Materialistas las que pueden, en verdad, llevarnos a la experiencia de la Verdad; no son las Escuelas de tipo Espiritualista, o las Religiones, las que pueden llevarnos a la experiencia directa de Eso que no es del Tiempo, de Eso que está más allá del cuerpo, de los afectos y de la mente.

Quien quiera llegar a conocer la Verdad, debe conocerse a sí mismos profundamente, debe Autoexplorarse para saber quién es, de dónde viene, para dónde va, cuál es el objetivo de la existencia, para qué viven, por qué viven… Amigos, yo les invito al estudio de sí mismos, a que se conozcan. Ustedes no se conocen a sí mismos y necesitan conocerse. Se les ha dicho muchas veces que tienen la CONSCIENCIA DORMIDA, pero no lo entienden. Y si a las gentes del mundo les dijéramos que “duermen”, se enojarían con nosotros; mas duermen… Existe la FUERZA HIPNÓTICA en toda la Naturaleza, está activa, es terrible…

Obviamente, cada uno de nosotros está hipnotizado y eso es lamentable. Vienen las guerras, y nosotros vamos a las guerras contra nuestra voluntad, pero vamos, porque estamos HIPNOTIZADOS… En realidad de verdad, las gentes ni siquiera ven los Fenómenos Físicos que suceden a nuestro alrededor. No los pueden ver, porque se hallan en ESTADO DE HIPNOSIS. Se hace urgente, pues, DESPERTAR. En el Mundo Oriental, la Conciencia despierta y desarrollada recibe el nombre de esotérico de “BODHICITTA”. Se nos ha dicho que quien tiene en su corazón el Bodhicitta despierto, nada tiene que temer de los Señores de la Ley; hasta ellos le respetan, porque puede negociar con ellos y salir victorioso. El Bodhicitta es un tesoro que todas las gentes del Mundo Oriental aspiran tener. Quien posea el Bodhicitta, obviamente, llegará a la ILUMINACIÓN…

Todos queremos ver lo qué es lo que hay de “tejas para arriba”, todos queremos tocar las grandes realidades del Ser, pero eso solamente es posible mediante la Iluminación. Se nos ha dicho, en Ciencia Esotérica Oriental, que antes de que nazca en nosotros el Bodhisattva, debe nacer el Bodhicitta. Es decir, que necesitamos despertar la Conciencia primero que todo. Una Conciencia dormida, una Conciencia hipnotizada no puede saber nada de Dios, ni de lo Real, ni de la Verdad, ni de Eso que está más allá de la muerte. Una Conciencia dormida lo único que puede, es vivir en virtud de su propio condicionamiento. Necesitamos despertar, saber qué es lo que hay más allá de la muerte, saber qué es lo que existe realmente en el Umbral del Misterio. Desgraciadamente, las gentes continúan con la Conciencia dormida. En el Mundo Oriental se dice que “cuando la Conciencia despierta, ésta se transforma en el Bodhicitta”.

Obviamente, éste, en sí mismo, significa múltiples Poderes Cósmicos… Sí, se habla de Facultades Trascendentales, pero éstas sólo surgen en nosotros cuando la Conciencia despierta. El Oro Espiritual del Bodhicitta es grandioso, sublime, terriblemente Divino… Necesitamos nosotros, en verdad, del ORO DE LA CONCIENCIA DESPIERTA; sólo así podremos llegar a experimentar lo Real, Eso que no es del Tiempo… Hay dos aspectos muy importantes en la vida, mis queridos amigos: El uno es este mundo doloroso en que vivimos, o sea, el MUNDO DE LA RELATIVIDAD, y el otro, es el VACÍO ILUMINADOR. Obviamente, el Vacío Iluminador está más allá del cuerpo, de los afectos y de la mente. Nosotros vivimos, en el Mundo de la Relatividad; aquí, donde todo se procesa en virtud de los opuestos: Bien y mal, alegría y dolor, victoria y derrota, etc., etc., etc.

En este mundo del dualismo conceptual, todo es amargura: Nacer es dolor, vivir es dolor; dolor es la vejez y hasta en la muerte hay dolor. Nosotros necesitamos liberarnos del mundo del dolor; necesitamos dar el GRAN SALTO para caer en el Vacío Iluminador, más allá del cuerpo, de los afectos y de la mente… Nadie podría, en realidad de verdad, dar el Gran Salto sino hubiese aniquilado el “querido Ego”. Es decir, si no hubiese disuelto el Yo de la Psicología. Necesitamos pulverizar el Ego, si queremos dar el Gran Salto… Amigos: Es bueno que ustedes entiendan que existen muchos CIELOS y también esta Tierra dolorosa. El Vacío Iluminador, en sí mismo, está mucho más allá de los Cielos y de la Tierra; el Vacío Iluminador es lo que es, lo que siempre ha sido y lo que siempre será; es la vida que palpita en cada átomo, como palpita en cada Sol.

Nosotros necesitamos adquirir la verdadera LIBERTAD DEL SER, hasta lograr la dicha a la que tenemos derecho, conseguir la FELICIDAD AUTÉNTICA DEL SER; salir de esta cárcel del dolor en que nos encontramos; abandonar este océano de las amarguras, mas esto solamente es posible mediante el Gran Salto, cayendo en el Vacío Iluminador. Hay Religiones en el mundo que nos ofrecen muchas formas de santificación. Yo quiero decirles a ustedes que en el Vacío Iluminador no hay Santos, que está más allá de la santidad. Los Santos son grandiosos, pero ellos nacen “por sus méritos” en algunos Cielos inefables y después vuelven a nacer en esta Tierra de dolor.

Debemos libertarnos de los Cielos y de la Tierra; ¡queremos la Verdad y nada más que la Verdad, cueste lo que cueste! Ésta no nos las pueden ofrecer las Escuelas Espiritualistas, ni las Sectas, ni las Religiones, ni tampoco las Escuelas de tipo Materialista, ni el Marxismo-Leninismo, ni su Dialéctica. Porque, repito, Espiritualismo y Materialismo no son más que los dos Polos de la Substancia Universal Homogénea que originalmente está depositada entre el Caos.

Nada saben los Materialistas y los Espiritualistas sobre esa Substancia que se llama “Materia”. Nosotros necesitamos dar el Gran Salto y caer en el Vacío Iluminador; y las Escuelas de Derecha o de Izquierda no pueden darnos la experiencia de la Verdad… Amigos, ha llegado la hora de entender estas cuestiones profundamente y en todos los Niveles de la Mente. Mucho (he dicho), se admira a los grandes Místicos, a los grandes Santos. Mas digo: Ellos también, no solamente nacen en los Cielos, sino que de regreso vuelven a este Valle de Amarguras, a esta Tierra dolorosa… Necesitamos libertarnos de esta Rueda Fatal del Samsara y entrar en el Vacío Iluminador, más allá de esta Maquinaria espantosa de la Relatividad. Así pues, el Vacío Iluminador y la Relatividad son también, en el fondo, dos antítesis.

El Vacío Iluminador, en el fondo, no es más que la antesala de la GRAN REALIDAD, de la TALIDAD. Necesitamos en verdad no solamente alcanzar el Vacío Iluminador, sino, posteriormente, sumergirnos en la Gran Realidad, en la Verdad… Jesús El Cristo dijo: “Conoced la Verdad y ella os hará libres”… Digo, en verdad, queridos amigos, que nosotros tenemos aquí, en esta Escuela, métodos, medios, como para que ustedes puedan conocer directamente la Verdad. Les enseñamos y les enseñaremos aquí, la TÉCNICA DE LA MEDITACIÓN; y un día llegará en que la Conciencia de ustedes podrá desembotellarse de entre el Yo, de entre el Ego, de entre la persona humana, para experimentar, en verdad, Eso que no es del Tiempo, Eso que es la Verdad…

Es necesario saber que la humanidad ha sido víctima de una gran ilusión: Porque de un lado, las Escuelas de la Derecha con sus Pontífices del DIOS-ESPÍRITU, y del otro, las Escuelas de la Izquierda con sus Pontífices del DIOS-MATERIA, unos y otros están hipnotizados. Porque polarizarse únicamente con la Derecha o con la Izquierda, es algo incompleto. Necesitamos comprender (y repito, y he repetido muchas veces esta noche) que esto que llamamos “Materia” no es más que una Substancia Homogénea con dos Polos:

Positivo y Negativo. Es necesario que no seamos víctima de la lucha de estos dos Polos; veamos nosotros que más allá de estos dos Polos está la síntesis; que la síntesis de esto es que este mundo no es más que una Substancia Homogénea cristalizada, y que en su estado original es Anímica, es Divinal. Entendido esto, comprendiendo que las Escuelas de Derecha o de Izquierda no pueden, en modo alguno, entregarnos la Verdad, debemos buscar dentro de nosotros mismos, debemos AUTOCONOCERNOS a sí mismos, debemos AUTOEXPLORARNOS a sí mismos, para saber quiénes somos, de dónde venimos y para dónde vamos, no porque otros nos lo digan o nos lo dejen de decir, sino por sí mismos.

Es obvio que si nos Autoexploramos, repito, encontramos al Yo de la Psicología. Y este Yo es lo que nos interesa estudiar: Este Yo que sufre; este Yo que tiene tantas aspiraciones; este Yo tiene que pagar alquiler de casa; este Yo que tiene que pagar impuestos; este Yo tiene que levantar hijos; este Yo tiene que cumplir obligaciones, etc., ¿qué es? ¿De qué sirve que continuemos una vida mecánica, llena de hábitos equivocados? Más vale que de una vez nos dediquemos al conocimiento de sí mismos.

Se hace necesario conocernos para que nuestra Conciencia despierte. Una Conciencia despierta, un Bodhicitta despierto, es de un valor inapreciable. Para aquéllos que saben de Esoterismo, les diré lo siguiente: Si un Bodhisattva no tiene el Bodhicitta despierto, no puede servir a los propósitos de su DIOS INTERIOR PROFUNDO, no podrá compartir las LEYES DE LOS BUDDHAS, no podrá trabajar con el CÍRCULO CONSCIENTE DE LA HUMANIDAD SOLAR, que opera sobre los Centros Superiores del Ser.

Quien quiera (por ejemplo) conocer la ALTA MAGIA, necesita, antes que todo, aprenderse de memoria todos los Mantrams, todos los Exorcismos, todas las Conjuraciones, etc. Similarmente digo, también, que aquéllos que quieran llegar a compartir la vida de los Dioses, que aquéllos que quieran compartir la vida de los Seres Inefables, que aquéllos que quieran compartir la vida de los Buddhas y de los Cristificados, necesitan, primero que todo, DESPERTAR SU CONCIENCIA, porque con la Conciencia dormida no puede uno ver, oír, tocar y palpar las grandes realidades de los Mundos Superiores. Con la Conciencia dormida no puede ser uno un investigador de lo Real; con la Conciencia dormida no puede uno, en realidad de verdad, entrar en contacto con el Círculo Consciente de la Humanidad Solar, que opera sobre los Centros Superiores del Ser. Es indispensable, antes que todo, despertar la Conciencia aquí y ahora.

Sí digo, en verdad, que ustedes están dormidos y que deben despertar… Es en el terreno de la vida práctica, en relación con nuestros familiares, en la calle, en el Templo, en la Escuela, etc., donde nuestros defectos escondidos afloran, y si nos hallamos alertas y vigilantes como el vigía en época de guerra, entonces los vemos. Defecto descubierto, debe ser estudiado, analizado, comprendido profundamente en todos los NIVELES DE LA MENTE. Cuando uno ha comprendido un defecto psicológico debe DESINTEGRARLO, reducirlo a polvareda cósmica. La Mente, por sí misma, no podría jamás alterar radicalmente ningún defecto de tipo psicológico.

La Mente, solamente puede rotular los defectos, pasarlos de un departamento a otro, etc., mas jamás aniquilarlos. Necesitamos de un PODER QUE SEA SUPERIOR A LA MENTE, de un Poder que pueda desintegrar nuestros defectos psicológicos para liberar nuestra Conciencia, para despertarla. Afortunadamente ese Poder se halla en estado latente dentro de cada uno de nos. Quiero referirme, en forma enfática, a DEVI KUNDALINI-SHAKTI, la Serpiente Ígnea de nuestros mágicos poderes. Ella, es una variante de nuestro propio Ser; ella, y solamente ella, puede ayudarnos…

Recordemos nosotros a la CIBELES de Creta, o la TONANTZIN de nuestros antepasados Mexicanos; recordemos a la ISIS MORENA de la tierra Egipcia; a la DIANA CAZADORA de la tierra sagrada de los Helenos; a MARÍA, MARAH, a DIOS-MADRE. Existe en el fondo de nuestra Conciencia y es una parte de nuestro Ser. Por ese motivo, todas las Religiones Ortodoxas del pasado le rindieron culto… ¡Marah, STELLA MARIS!, puede ayudarnos en este trabajo de desintegración de nuestros defectos psicológicos, a condición de haberlos comprendido previamente, en todos los recovecos de la Mente. Cuando uno lo ha entendido a fondo, cuando uno ha descubierto un defecto y lo ha analizado, entonces está preparado para su desintegración. Bastaría solamente concentrarse en Stella Ma ris (la MADRE CÓSMICA DIVINAL que en nuestro interior existe), y suplicarle, en forma enfática, reduzca a polvo tal defecto.

El resultado no se hará esperar y el mismo se convertirá en polvareda cósmica, liberando el porcentaje de Conciencia que tenga allí embotellado Así, mis queridos amigos, por ese camino, aniquilando los agregados psíquicos que en su conjunto constituyen el Ego, el Yo, el mí mismo, el sí mismo, lograremos el Despertar de la Conciencia. ¿Cómo podría alguien, por ejemplo, con Conciencia dormida, compartir la vida de los Gran-des Iluminados? ¡Necesitamos despertar, y eso es imprescindible, impostergable, urgente, inaplazable!…

Amigos, quien tiene la Conciencia despierta puede enfrentarse a los peores enemigos y jamás será vencido; quien tiene la Conciencia despierta, en realidad de verdad podrá penetrar en el fondo de los océanos y entrar en los Palacios de la Serpiente; quien tiene la Conciencia despierta gozará la dicha del Espíritu Puro. ¡Así, amigos que ha llegado la hora de comprender la necesidad de despertar. Triste, es muy triste vivir dormido!… En este terreno de las inquietudes esotéricas trascendentales, hay en verdad dos corrientes definidas que hay tratar de comprender: De un lado tenemos nosotros a los BUDDHAS PRATYEKAS y SRAVAKAS, ellos trabajan sobre sí mismos, cumplen sus deberes en la vida; son, en realidad de verdad, seres que han buscado su Liberación individual, más nunca han encarnado al Cristo Cósmico.

Y del otro lado tenemos, en verdad, a los BODHISATTVAS DE COMPASIÓN, aquéllos que habiendo creado los CUERPOS EXISTENCIALES SUPERIORES DEL SER, es decir, LOS CUERPOS MERCURIALES, se han dedicado a trabajar con el TERCER FACTOR de la Revolución de la Consciencia, se han Sacrificado por la Humanidad. ¡Esos (los Bodhisattvas que a través de distintas eternidades han venido entregando su sangre por todos los pueblos), ésos, precisamente ésos, son los que en verdad vienen a recibir más tarde la INICIACIÓN VENUSTA; y en ese gran evento cósmico encarnan al Cristo! Escrito está: “Al que sabe la Palabra da poder; nadie la pronunció, nadie la pronunciará, sino solamente aquél que lo tiene encarnado”…

H. P. B. llama “Bodhisattvas” a aquéllos que tienen los Cuerpos Existenciales Superiores del Ser, mediante el cumplimiento del DEBER PARLOCK DEL SER. Pero hablando en riguroso Esoterismo Crístico y Budista, llegamos a la conclusión de que BODHISATTVAS, realmente, sólo son aquéllos que se han sacrificado por las humanidades planetarias a través de sucesivos Maha-Manvantaras. Sólo ellos, los Bodhisattvas, pueden llegar a la OMNISCIENCIA… Se llega al Estado Bodhisáttvico mediante el SACRIFICIO POR LA HUMANIDAD, luchando por llevar esta Doctrina a todos los pueblos de la Tierra, sin diferencias de raza, credo, casta o color…

Se llega a Bodhisattva lanzándose, por todas estas calles de Dios, con la palabra que crea y vuelve nuevamente a crear; se llega a Bodhisattva amando a nuestros enemigos, bendiciendo a los que nos maldicen y persiguen; se llega a Bodhisattva besando el látigo del verdugo… Digo, en verdad, que aquéllos que no sean capaces de sacrificarse por la humanidad, no podrán jamás llegar a ser Bodhisattvas. Aquél que ha despertado su Consciencia (hablando en lenguaje Oriental diríamos: “Aquél que ha despertado su Bodhicitta”), obviamente nunca podría ser detenido en su camino hacia la Gran Realidad. Los Buddhas Pratyekas podrán detenerlo en su marcha; marcharía con paso firme y decidido hacia la Liberación Final… He ahí, pues, la ventaja de trabajar con el Tercer Factor de la Revolución de la Conciencia, el del Sacrificio por nuestros semejantes, el del Amor por todos los seres que pueblan la faz de la Tierra.

Ése es el camino que conduce al ESTADO BODHISÁTTVICO. Llegar a encarnar al CRISTO ÍNTIMO es el evento cósmico más formidable de todo el Universo. Mas sólo podría llegarse a encarnar al Verbo, a la Gran Palabra, al Señor de Perfecciones, cuando se ha llegado al Estado Bodhisáttvico.

Por eso yo invito, a todos los que están aquí presentes, para estudiar la Doctrina y marchar por el Camino del Sacrificio hacia la Liberación Final. Así, y sólo así, se puede llegar al Estado Bodhisáttvico. Mis queridos amigos, entiendan, comprendan que el AMOR es el fundamento de todo lo que es, ha sido y será. Sólo amando a nuestros peores enemigos, devolviendo bien por mal, podríamos en verdad, amigos míos, llegar al Estado Bodhisáttvico. Sólo llevando la palabra con humildad, de puerta en puerta, a las gentes, sólo llamando a las muchedumbres para que nos escuchen, podríamos llegar al Estado Bodhisáttvico.

Es urgente entender que el Bodhicitta, es decir, la Conciencia despierta, es un Don precioso, extraordinario; pero nosotros no hemos sabido aprovechar ese Don y tenemos la Conciencia dormida, estamos HIPNOTIZADOS, viviendo como máquinas en un mundo terriblemente doloroso. Todos quieren dicha, alegría, pero la alegría no es posible lograrla mientras la Conciencia esté hipnotizada. Hay gentes que me escriben de todas partes, deseando mejorar la situación económica; deseando más: mejorar las circunstancias de la vida práctica…

Obviamente, no es posible mejorar si no pasamos a un Nivel Superior del Ser. Dentro de este Nivel en que nos encontramos, existen los sufrimientos que nos rodean actualmente, las circunstancias que actualmente nos vienen diariamente. Solamente podríamos cambiar de vida si pasamos a un Nivel Superior del Ser. Es necesario saber que por debajo de nosotros existe un NIVEL INFERIOR DEL SER; por encima de nosotros existe un NIVEL SUPERIOR DEL SER. A cada Nivel del Ser le corresponde una serie de circunstancias, buenas o malas.

Si queremos cambiar de vida, mejorar la situación, ser diferentes, necesitamos pasar a un Nivel Superior del Ser. Y eso solamente es posible destruyendo los agregados psíquicos que llevamos en nuestro interior. A medida que vayamos eliminando, desintegrando nuestros defectos psicológicos, iremos pasando a escalones cada vez más y más elevados del Ser, y por último, llegará el día en que pasaremos al Nivel Superior del Ser, al Nivel más elevado, y entonces vendrá la LIBERACIÓN FINAL.

Empero, antes de que eso venga a nosotros, antes de que la Gran Realidad venga a nosotros y nosotros a ella, necesitamos pasar por la ANIQUILACIÓN BUDISTA, desintegrar la totalidad del Ego, del Yo, del mí mismo, del sí mismo… Amigos míos: Para llegar al despertar completo, se necesita tener TENACIDAD EN EL TRABAJO; diariamente luchar incansablemente, vigilándonos a sí mismos en la casa, en la calle, entre los amigos, en el trabajo, etc., y defecto que descubramos en nuestras palabras, en nuestras miradas, en nuestros pensamientos, debemos aniquilarlo. Si perseveramos así, si vamos comprendiendo la necesidad de trabajar con cada defecto que surja en nosotros, la Conciencia irá despertando progresivamente.

Así, algún día, la Conciencia estará totalmente despierta. Yo les digo a ustedes, en verdad, que el Oro más precioso que existe, es el ORO DEL SER, es el Oro del Bodhicitta, es decir, de la Conciencia despierta. El Oro que llega a resplandecer en el Cuerpo Astral, o en la Mente, o la Voluntad (en cualquiera de los Cuerpos Existenciales Superiores del Ser), ha sido proporcionado por el Bodhicitta, es decir, por la Conciencia despierta. La Conciencia despierta es un tesoro apreciadísimo.

Vean ustedes, si alguien va aprender el deporte aquél de lanzar flechas en un blanco, lo primero que tendrá que hacer es, aprender a pararse en tierra, colocar sus pies como es debido, sus piernas en la postura apropiada y luego, sí, podrá disparar las flechas al blanco, y ésta irá a parar al blanco con absoluta seguridad. Similarmente digo:

Antes de que nosotros podamos saber algo sobre lo Real, sobre la Verdad, debemos aprender a fundamentarnos en la Conciencia despierta, debemos despertarla y aprendernos a basarnos en ella para poder, en verdad, trabajar conscientemente en los mundos más elevados. Los grandes problemas del Universo dejan de existir cuando la Conciencia está despierta. La Conciencia, es decir, el Bodhicitta en el Mundo Oriental, es el fundamento básico en que debemos apoyarnos para poder lanzarnos a las altas exploraciones en los Mundos Cósmicos. Pero una Conciencia dormida nada puede hacer; una Conciencia dormida vivirá siempre en profundas tinieblas…

Amigos, ha llegado la hora de entender lo que es el valor de la Conciencia despierta… Alguna vez ustedes habrán oído hablar sobre la “leche de una leona”: Si una gota de leche de leona se depositase entre un recipiente lleno de leche de vaca, verán ustedes cómo la gota de leche de la leona, no se confundirá con la leche de la vaca y caerá al fondo del recipiente sin confundirse, o flotará entre el líquido elemento. Así también es el Bodhicitta despierto, la Conciencia despierta.

Quien tenga la Conciencia despierta podrá vivir entre todas las perversidades del mundo sin confundirse con las mismas; podrá descender a los Mundos Infiernos sin confundirse con las perversidades de los Demonios. Será fuerte, en el sentido ético de la palabra… Así, amigos míos, que la Conciencia es maravillosa, pero no la hemos sabido aprovechar. Existe la CIENCIA DE LA CONCIENCIA, que es grandiosa… Ha llegado la hora de entender, amigos míos, que mediante la Conciencia despierta es posible dar el Gran Salto para caer de lleno en la Gran Realidad de la vida libre en su movimiento, más allá de esta Maquinaria Dualística y espantosa de la Relatividad.

Todos nosotros somos víctimas de la Ley; el KARMA cae sobre cada uno de nosotros como un rayo de venganza. Erramos y volvemos a errar, y el Karma nos castiga y nos vuelve a castigar. Estamos en un mundo de CAUSAS Y EFECTOS. Cada palabra dura (por ejemplo) que nosotros pronunciamos, caerá más tarde sobre nosotros como un rayo de venganza. Hacemos el mal y recibimos el mal; y no hay efecto sin causa ni causa sin efecto…

Ésta es la MAQUINARIA DE LA RELATIVIDAD Dentro de esta Maquinaria de la Relatividad todo se procesa de acuerdo con la Ley de Causa y Efecto. Todo este encadenamiento terrible de Causas y Efectos nos tiene esclavizados en este Valle de la Amargura, en esta polvareda cósmica… En este Mundo de Asociaciones y Combinaciones, lo único que existe es el dolor. Necesitamos salirnos de este Mundo de Combinaciones y dar el Gran Salto para caer en el seno del Vacío Iluminador, y posteriormente, entrar en la Gran Realidad, en la Talidad, en la Vida libre en su movimiento.

Mas esto no sería posible si no nos autoexploráramos profundamente para descubrir nuestros defectos psicológicos: Ira, codicia, lujuria, envidia, orgullo, pereza, gula, etc. Son los múltiples defectos que en nuestro interior cargamos, y cada uno de éstos es cabeza de legión… En la doctrina egipcia habla de los DEMONIOS ROJOS DE SETH. Éstos son los agregados psíquicos que llevamos en nuestro interior, las personificaciones vivas de nuestros defectos psicológicos. Es necesario desintegrarlos, convertirlos en polvo de la tierra, en polvo cósmico, para despertar la Conciencia y dar el Gran Salto, el “atrevido salto” que nos permitirá caer en el Vacío Iluminador y posteriormente ingresar al seno de la Gran Realidad… Pero éste no es un salto de tipo evolutivo.

La EVOLUCIÓN es la hermana gemela de la INVOLUCIÓN; son Leyes Mecánicas de este Mundo de la Relatividad .Y ninguna de estas dos Leyes podrían permitirnos el ingreso a la Gran Realidad. No es mediante evoluciones incesantes (a través de millones de vidas) como podremos, un día, llegar a la Gran Realidad, ¡no! Los innumerables nacimientos y las Leyes de la Evolución y de la Involución, giran aquí, en este Universo de la Relatividad, incesantemente. Y ninguna de estas dos Leyes (de Evolución e Involución), podrán permitirnos dar el Gran Salto. Necesitamos, en verdad, ser REVOLUCIONARIOS, REBELDES, dar el Gran Salto cueste lo que cueste; y esto solamente es posible rompiendo cadenas, destruyendo todas esas perversidades que en nuestro interior llevamos, todas esas barbaridades que nos hacen infelices, desgraciados…

Sólo así, mis queridos amigos, podremos dar el Gran Salto. Hay Santos virtuosos e inefables que las Religiones reverencian, que tienen méritos; pero éstos, en última síntesis, solamente (como ya les dije), les permitirán nacer en los Cielos del espacio o en la Tierra dolorosa, más nunca ingresar en el seno de la Gran Realidad (allí no hay Santos); en el seno de la Gran Realidad solamente existe la vida libre en su movimiento, los Hombres que se han libertado del sí mismo, los que los han destruido en la vida, los que se han rebelado contra la Maquinaria horrible de la Relatividad…

Es la REVOLUCIÓN EN MARCHA, lo que necesitamos, si queremos la Liberación Final Sólo así llegaremos donde tenemos que llegar: a la auténtica dicha (a la que tenemos derecho), a la dicha inagotable. Pero necesitamos romper cadenas, revolucionarnos contra todo lo que existe actualmente en la Derecha o en la Izquierda del mundo; comprender que la Materia no es más que una Substancia Homogénea que, en última síntesis, deviene maravillosa del Caos inefable, del Espacio ilimitado, de lo Divinal, y no dejarnos parcializar por las Escuelas de Derecha o de Izquierda, de Espiritualismo o de Materialismo.

¿Qué saben, por ejemplo, los Pontífices de las Religiones sobre lo Real, sobre la Talidad, sobre Eso que está más allá del cuerpo, de los afectos y de la mente? Podrán haber leído las Enseñanzas de los Iluminados, pero no las han realizado en sí mismos y por lo tanto no han experimentado nada. Y ¿qué saben los Pontífices del Materialismo sobre la Materia? ¡Nada! Miremos nosotros la Materia, un pedazo de hierro, ¿qué vemos allí? “¡Materia!”, dirán los Materialistas; pero también le llaman “Materia” a un pedazo de vidrio (empirismo puro, diríamos, entre paréntesis). Pero esos átomos que giran allí, alrededor de sus centros gravitacionales con sus cargas eléctricas, ¿qué significa? Nada saben ellos sobre eso. Solamente saben que de los iones, giran alrededor de sus electrones y entienden algo de protones, etc., pero nada más. Nosotros decimos que existen PARTÍCULAS ÍGNEAS dentro de esos átomos (ALMAS ÍGNEAS).

Y esas Almas Ígneas son en realidad extraordinarias; esas Almas Ígneas, esas Partículas Ígneas, son las que tejen y destejen, incesantemente, eso que se llama “Materia”, eso que muchos llaman “Materia” (cuestión de nombre), porque la Substancia nadie la conoce… Hay Magos en el Oriente, que actúan sobre esas Almas Ígneas o Partículas Ígneas metidas dentro de los átomos, y por medio de ellas hacen prodigios extraordinarios. Así que, en última síntesis, estos átomos llevan también eso que se llama “ESPÍRITU o FUEGO”…

Es bueno entender que esas cargas eléctricas de los átomos son conscientes, son las Almas Ígneas. Entendiendo esto (entendiendo que en todo existe el Espíritu), vale la pena que reflexionemos un poco… ¿Qué saben los físicos sobre la Substancia en sí? ¡Nada, absolutamente nada! Por lo tanto, la hora ha llegado en que nosotros, pasando más allá de las cargas eléctricas de los átomos, o las cargas a la inversa en la Antimateria, nos dediquemos a la Autoexploración de sí mismos, con el propósito de saber algo sobre nosotros mismos, algo sobre nuestro propio Ser. A eso nos hemos dedicado y ése es el propósito de las Enseñanzas que aquí tenemos…

Cada quien es libre de investigar en la Física, en la Química, en donde quiera, pero lo más importante para nosotros es investigarnos a sí mismos, autoexplorarnos profundamente. Sólo así llegaremos a donde debemos llegar, mis queridos amigos… La Conciencia, repito, es valiosa y vale la pena que pongamos atención en ella. Pero, para despertarla, para sacarla del estado de sopor en que se encuentra, necesitamos aprender a AUTOOBSERVARNOS diariamente, esto con el propósito de Autodescubrirnos. No hay duda de que en todo Autodescubrimiento existe AUTORREVELACIÓN. Cuando uno descubre un defecto y lo desintegra, conoce una nueva Verdad, recibe un mensaje de Luz, aprende algo nuevo. Así es como diariamente podemos alimentarnos con el PAN TRANSUBSTANCIAL venido de lo Alto, que es el PAN DE LA SABIDURÍA.

A medida que vayamos desintegrando el Ego nos iremos alimentando con el Pan de la Sabiduría. Empero, antes de desintegrar el Ego, lo único que tienen los seres humanos en su Mente son ideas, y teorías y más teorías, y como dijera Goethe: “Toda teoría es gris y sólo es verde el árbol de doradas frutas, que es la vida”… A los MISIONEROS GNÓSTICOS me dirijo también esta noche. Ellos van siguiendo por el Camino Bodhisáttvico, porque sacrificándose por la humanidad, estos Misioneros, van avanzando por esa Senda que un día habrá de convertirlos en Bodhisattvas. Ellos están trabajando para algún día (más tarde, a través del tiempo) llegar a encarnar al Cristo Íntimo (he ahí el mérito de los Bodhisattvas), mas es también lamentable que algunos Misioneros, todavía tengan la forma de pensar que tenían antes de entrar en estos estudios. Los Misioneros, en verdad, necesitan transformar su forma de pensar, ser distintos, para que puedan mostrarles el Camino a otros.

Existen también Misioneros que actualmente marchan muy bien: Marchan victoriosos por la senda de las Grandes Realizaciones y que prometen mucho para el Estado Bodhisáttvico. A ellos, naturalmente, no puedo menos que hacerles llegar mis felicitaciones y mis salutaciones… Amigos: Es bueno entender, de una vez y para siempre, que a medida que nosotros vamos avanzando por este camino doloroso, surgirá en nosotros el YO DEL AUTOMÉRITO. Entiéndase que nosotros seremos víctimas de ese Yo. Debemos ser vigilantes cuando trabajamos por el despertar de la Conciencia, porque todos tenemos tendencia a darle vida al Yo del automérito. En verdad que nosotros no tenemos méritos de ninguna especie, porque MÉRITOS ÚNICAMENTE LOS TIENE EL PADRE que está en secreto; Él y sólo Él. El Yo del automérito puede entorpecer los pasos que llevamos hacia la Gran Realidad.

Eso de creer que lo merecemos todo, es un absurdo, porque nosotros nada merecemos. Pero el Yo del automérito nos hará creer dignos de todo mérito y nos detendrá en el Camino, será óbice para el avance hacia la Gran Realidad. El Yo del automérito puede llevarnos a nacer en algunos CIELOS inefables y luego nos traerá de regreso a este Valle de Lágrimas. Reconozcamos que nosotros nada valemos, nada somos, que el único digno de alabanza y mérito es nuestro Padre que está en secreto. Si así lo hacemos, si así procedemos después de haber examinado todo el curso de nuestra equivocada existencia, se disolverá en nosotros el Yo del automérito.

Es también necesario saber que existe el YO DEL ORGULLO MÍSTICO, la tendencia a creernos Dioses, a creernos Inefables, a creernos Poderosos, Señores del Universo, Grandes Iniciados con tantas y tantas Iniciaciones. Esto nos lleva por el camino equivocado; porque es urgente entender que hay tres tipos de relaciones: [Primera] LA RELACIÓN CON NUESTRO PROPIO CUERPO. Si nosotros no sabemos relacionarnos con nuestro propio cuerpo, nos enfermamos. Segunda, LA RELACIÓN CON EL MEDIO AMBIENTE en que nos movemos. Si no sabemos relacionarnos con las gentes, nos formamos conflictos. Y tercera, la más importante relación, es LA RELACIÓN CONSIGO MISMO, con las distintas partes Autónomas y Autoconscientes de nuestro propio Ser.

Para poder llegar al Extasis, al Samadhi, a la experiencia de la Gran Realidad, se necesita, antes que todo, aprendernos a relacionar, no solamente con las distintas partes de nuestro propio Ser que en nuestro interior cargamos, sino aún más: Con la parte más elevada de nuestro propio Ser, es decir, con nuestro Padre que está en secreto, con el Anciano de los Días, con la Verdad de las verdades, con lo Oculto de lo oculto…

El orgullo, el orgullo místico, el engreimiento, creernos Dioses, sentirnos inefables, es óbice, obstáculo para la relación correcta y perfecta con las distintas partes del Ser, y más aún: Con la parte más elevada del Ser. Y quien no aprende a relacionarse con las distintas partes del Ser, y muy especialmente con la parte más alta del Ser, no podrá llegar a experimentar nunca Eso que es la Verdad, Eso que está más allá del cuerpo, de los afectos y de la mente… Ha llegado la hora de entender, también, mis queridos amigos, que el PSIQUISMO INFERIOR no puede llevarnos nunca a la Gran Realidad.

En el mundo abundan demasiado los Psíquicos Inferiores, aquéllos que gozan poniendo las manos sobre una mesa para que esta se mueva, aquellos que gozan hipnotizando a otros, aquéllos que gozan en sesiones mediumnímicas o espiritistas, aquéllos que creen que mediante el desarrollo de ciertos Poderes Psíquicos pueden llegar a la Verdad. Obviamente, el Psiquismo Inferior sólo sirve para atarnos más y más a esta Maquinaria horrorosa de la Relatividad. Nosotros necesitamos llegar a la parte más alta del Ser, y no es posible esto si nos entretuviéramos con el Psiquismo Inferior.

Es necesario entender, mis queridos amigos, que las Facultades más nobles del Ser solamente pueden despertar en nosotros con la destrucción del mí mismo, del Ego, es decir, pasando por la Aniquilación Budista… Hay una Facultad conocida como INTUICIÓN. La Intuición tiene distintos grados, pero la forma de Intuición más elevada sólo es la del tipo llamado PRAJÑA-PARAMITA, que es la Facultad que nos permitirá llegar algún día a experimentar, mediante la Conciencia despierta, Eso que no es del tiempo, de Eso que está más allá del cuerpo, de los afectos y de la mente, Eso que en el Oriente se llama “Talidad”, más allá del Vacío Iluminador…

Pero quien quiera llegar al despertar del grado más elevado de la Intuición Prajña-Paramita, necesitará del despertar total de la Conciencia. Sólo así lo logrará. Así que no se desdeñe eliminar los defectos psicológicos, que no se les mire como cuestión meramente de mentecatos, que nos se crea que es algo meramente sectario de tipo pseudo-religioso o pietista. Que se entienda, de una vez y para siempre, que esto de la eliminación de agregados psíquicos pertenece a la CIENCIA DE LA CONCIENCIA; que entienda, de una vez y para siempre, que es lo más importante.

Porque mientras la Conciencia esté embutida entre el Ego, entre los defectos: Entre el odio, entre la ira, entre la envidia, entre los celos, etc., el Despertar de la Conciencia será algo más que imposible. Hay una tendencia, siempre general, a subestimar esto de la eliminación de los defectos. Muchos de los que vienen a nuestras filas estudian el Esoterismo Gnóstico, pero subestiman, total-mente, la cuestión de la eliminación de los defectos psicológicos; les “huele” como a pseudo-religiosidad, como a cuestión cansona escuchada desde la infancia; no saben entender, realmente, lo que es la Ciencia de la Conciencia…

Amigos: No estoy invitándolos a santificaciones ni a puritanismos de ninguna especie. Estoy únicamente indicándoles el Camino de la MUERTE MÍSTICA, el Camino de la Aniquilación Budista y de la Gran Realidad. Amigos: En verdad quiero decirles a ustedes, en forma enfática, que ni los Materialistas ni los Espiritualistas, ninguno de estos dos Polos de la Substancia Única, pueden darnos la experiencia de lo Real. Ha llegado la hora de Autoexplorarnos, de Autoconocernos, para poder saber quiénes somos, romper cadenas y dar el Gran Salto en el Vacío iluminador. ¡Paz Inverencial!… [Aplausos]… Dígales si alguno quiere preguntar algo. Presentador. El Maestro está dispuesto a responder algunas preguntas de las que todos ustedes tengan en mente, con relación a la plática que acaba de dirigirnos…   

Samael Aun Weor

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