El Avatara

Samael Aun WeorMaestro, con sus enseñanzas irrefutables y llenas de tanta sabiduría muy pronto podrá ser jefe y hasta caudillo de muchos seguidores. ¿No será que usted quiere convertirse en algo así como un nuevo Pontífice o súper-caudillo?

Amigo mío, si esa sospecha suya fuera cierta entonces ya habría formado una nueva organización, la cual presupone como es indispensable, un jefe y una mesa directiva pero ya verá usted que nada de esto existe, porque para que queremos una nueva organización? ¿Qué ha ganado el mundo con tantas organizaciones que posee? ¿Para qué añadirle una mas?

Ya sabemos demasiado que cada individuo encaja dentro de una organización, algo así como una pieza automática dentro de un engranaje social, algo así como una figura inconsciente que repita siempre los mismos movimientos automáticos de la maquina.

Esto se llama sencillamente esclavitud. Castramiento volitivo. Mojigatería que a nada conduce. Misticismos morbosos que solo engendran vicios secretos. ¿Entonces para qué queremos una nueva organización?

Una organización es una maquinaria que marcha de acuerdo a reglas fijas y frías. Como si la vida pudiera encerrarse dentro de las normas artificiosas establecidas por la estulticia humana. ¿Entonces para que queremos una nueva organización?

Amigo mío, yo no sigo a nadie ni quiero que nadie me siga, lo que quiero es que cada cual se siga a sí mismo. Lo que quiero es que cada cual escuche a su propio Íntimo.

Que cada cual se convierta en caudillo de sí mismo; en el jefe de sí mismo y por ello no he venido a fundar ninguna nueva organización ni cobro dinero, ni doy certificados, ni extiendo diplomas, patentes, autorizaciones, etc.

No acepto alabanzas ni adulaciones, ni agasajos, ni me interesa el desprecio de los rencorosos.

Yo no soy más porque me alaben, ni menos porque me critiquen, porque yo siempre soy quien soy.

AUN WEOR MAESTRO DE MISTERIOS MAYORES DE LA FRATERNIDAD UNIVERSAL BLANCA La Revolución de Bel Capítulo 20º Conclusión

Añadir un comentario